Llegar a la cima requiere de confiar en Dios, de actitud y dedicación.

Llegar a la cima requiere de confiar en Dios, de actitud y dedicación.

martes, 26 de octubre de 2010

Hola amigos y seguidores del blog, quiero compartir con ustedes algo que tiene que ver con lo importante que es dar lo mejor de si,  y no conformarnos con lo que ya logramos.


Miguel es el mejor alumno de un prestigioso plantel educativo, el pasado viernes tuvo que realizar un examen muy difícil y definitivo para el año escolar, para esto Miguel se preparo y estudio mucho, quería ser el mejor.
El día del examen se presento puntual, como siempre, se sentó y comenzó a responderlo, estaba difícil, si, pero no imposible de lograrlo, se esforzó y aunque muy cansado logro terminarlo faltando 15 minutos para terminar el tiempo limite.


Cuando entregaron el resultado Miguel se dio cuenta que como siempre fue el mejor de la clase, saco el mejor puntaje, pero observo también que pudo haberlo hecho mejor, de las 50 preguntas contesto 47 acertadas.
Aunque feliz con el resultado Miguel piensa que un poco mas de esfuerzo, un poco mas de si, y hubiera quedado mas satisfecho, pues las 3 preguntas que faltaron el hubiera sido capaz de responderlas.


Esto me recuerda amigos una historia bíblica que se encuentra en el 2º libro de Reyes capitulo 13 , versículos 14-19, que dice así:


Estaba el profeta Elíseo enfermo de la enfermedad de que murió. Y vino el rey a visitarlo, entonces Elíseo le dijo:  Toma un arco y unas saetas. Tomó él entonces un arco y unas saetas. 
Luego dijo Eliseo al rey : Pon tu mano sobre el arco. Y puso él su mano sobre el arco. Entonces puso Eliseo sus manos sobre las manos del rey, y dijo: Abre la ventana que da al oriente. Y cuando él la abrió, dijo Eliseo: Tira. Y tirando él, dijo Eliseo: Saeta de salvación de Jehová, y saeta de salvación contra Siria; porque herirás a los sirios en Afec hasta consumirlos. 
Y le volvió a decir: Toma las saetas. Y luego que el rey  las hubo tomado, le dijo: Golpea la tierra. Y él la golpeó tres veces, y se detuvo. 
Entonces el varón de Dios, enojado contra él, le dijo: Al dar cinco o seis golpes, hubieras derrotado a Siria hasta no quedar ninguno; pero ahora sólo tres veces derrotarás a Siria. 




Entonces mis queridos amigos, esto nos enseña a dar siempre lo mejor de nosotros. No te detengas, dentro de ti hay un potencial que tu no has descubierto, quiero citar la frase que le oí a un gran profesor a quien aprecio mucho, el dijo: "Ora tanto tanto tanto, como si todo dependiera de Dios y esfuérzate tanto tanto tanto como si todo dependiera de ti".

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